jueves, 13 de septiembre de 2007

Amarillo no te pongas!!!...

Monterrey, N.L. a 13 de Septiembre de 2007

Resulta que estoy a punto de ir a un nuevo reencuentro con mi gente y mi tierra. Extrañamente, el pretexto vuelve a ser una boda… me la echo. Ya tengo ganas de entrarle a la bailada, a la platicada y al disfrute. Quien quite y ahora si nos reunamos toda la familia, toooodos los nueve hermanos (más asociados, retoños, etc.)!!!
Como diría mi suegro: “échate una familita!!!!”

Mientras nos preparamos para la pachanga, mi esposa, se encarga de castigar mi cartera: que si un vestido para las niñas, que si zapatos, que si el peinado, que si las uñas, total, que no veo el fin de este martirio financiero. –Pero, tienes un chorro de zapatos- cuestiono a mi cónyuge; -si, pero no tengo dorados de tacón-. Pobre de mi…

En medio de todo este rollo pre-fiestero, aparece uno de mis pupilos y me comenta con la emoción como quien acaba de ganarse un premio: -¿Supiste de la explosión?-, intenta entablar una conversación amarillista; -Na! No veo noticias-; -yo tampoco- afirma muy orondo, -nomás las prendo mientras me arreglo…- y se aleja a conseguir una persona que comparta su predilección. Me imagino que solamente ve las noticias de los ojos para afuera (es el mismo pupilo que me explicó que la razón por la que no entiende la información técnica a veces, es porque lee de los ojos para afuera). Y sin quererlo y sin creerlo, es un hijo de la manipulación mediática, ¿será casualidad que el logo de esa empresa sea del color amarillento? ¡Yaqué!

Si abro mi cuenta de correo personal, recibo aproximadamente dos correos que realmente que me interesan y decenas de correos amarillosos, donde me invitan a pedir por un niño que está enfermo de cáncer, o intentan tocar mi corazón con fotografías desgarradoras, o me mandan un mail que si mando a diez personas que conozca, recibiré una sorpresa en menos de una hora, o me mandan una cadena para conseguir la riqueza si la sigo, o la desgracia si la rompo. Y pudiera enumerar los más variados tópicos (desde el amarillo claro hasta el amarillo oro) que atañen a este tipo de mensajería (religión, superación personal, política, chistes, etc.) la cual sólo tiene un fin: conseguir bases de datos para después inundarnos con miles de correos llamados spam haciendo uso del morbo amarillento que cada humano tiene dentro de si. Y créeme Querido Lector, todos caen!!

Si circulo por una avenida y el tráfico está lento, estoy seguro que sucedió un accidente, ¿sabes Querido Lector, de qué lado es más lenta la fila? Efectivamente, del lado que no hubo accidente, ya que todos los que pasan al frente del evento, hacen gala del reportero que todos llevamos dentro, disminuimos el paso, contamos los involucrados, sacamos conclusiones de quien fue el culpable, nos lamentamos por la gente que chocó y de paso, detenemos el tráfico. Al llegar a la oficina el argumento es: -Nombre, había un chorro de tráfico, es que chocó una camioneta y un Chevy, pobre cuate-, ¿Yamiqué?

El otro día, recibí un correo de una amiga, que también es mi Comadre, donde demuestra su indignación por, voy a tratar de escribir más o menos lo que decía: que un hombre con una pistola apuntó al Padre Rogelio, hasta la gente se tiró al piso. Yo estuve en Misa, ese día, a esa hora. No me consta que la persona no trajera una pistola, pero la verdad, tampoco me consta que la tuviera. Nadie se tiró al piso (además de la persona que le platicó a mi amiga) solamente hubo una señora que se alejó del fulano. Lo sacaron entre dos personas y el pobre cuate iba gritando que no le hicieran nada, se me hace que tenía más miedo que un ilegal al brincar la frontera, a todas luces, se trataba de una persona que no está bien de sus facultades mentales. Claro que asusta ese tipo de situaciones, pero lo reprobable para mí es el hecho de aumentarlas de tamaño y cambiarlas de color, ¡Yanilahacen!

Yo sé que este tipo de artículos no suelen ser los favoritos, sin embargo, en la medida que terminemos con ese áureo color y nos volquemos hacía DIOS, podremos lograr algo que es escasísimo en estos días: la paz.

Ya para terminar y para aportar mi dosis de amarillismo, resulta que tengo un amigo que afirma que cada vez que toma leche, muere alguno de sus familiares. Mi querido amigo, el día de mañana comenzaré una colecta en todo Monterrey para juntarte todo tipo de juguitos, tesitos, sodas, calditos, agüitas de sabor, etc. Todo con el fin de que no vuelvas a tomar ningún tipo de líquido lácteo y conserves tu familia el mayor tiempo posible, ¿sale?

Querido Lector, un abrazo de color para quitar lo amarillo de tu vida,


El Escribidor

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